martes, 26 de mayo de 2020

El Chaco semiárido



La NASA publicó estas fotos del antes y después de un sector del Gran Chaco que abarca las provincias argentinas de Jujuy, Santiago del Estero, Chaco y Salta, siendo esta última la más perjudicada. En la progresión se muestra cómo fue avanzando la frontera agropecuaria frente al bosque seco típico de la zona a pesar de la ley de bosques 26.331 sancionada en 2007.

El Gran Chaco es una ecorregión de 650.000 km² que abarca cuatro países. Es el bosque seco más extenso en toda Sudamérica. En casi tres décadas el 20% de su superficie fue convertida en tierras de pastoreo o cultivo. Las imágenes satelitales de la NASA muestran su transformación en casi 20 años. ¿Pero por qué se cultiva soja en estas tierras ásperas y secas? Los avances tecnológicos lo hacen posible. Ahora es más fácil que antes cultivar en tierras difíciles. Argentina es el tercer productor mundial de soja y desde comienzos de este siglo los productores se vieron presionados por la demanda mundial a seguir produciendo cada vez más y por eso echaron manos a estas tierras que, a pesar de estar protegidas por la ley 26.331, siguen degradándose por la explotación sin control. La ley de bosques existe pero no se hace cumplir.

Una agricultura de este tipo no es sostenible. Siguen faltando las consideraciones sociales y ambientales para que lo sea, puesto que del éxito económico de quienes se aprovechan de ella no hay dudas. Esta negligencia tiene, entonces, consecuencias negativas a nivel social y ambiental. Socialmente, se desplazó a las poblaciones locales que conocen cómo funciona el subsistema natural. A nivel ambiental tenemos erosión, contaminación, pérdida de biomasa y un aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero, grandes contribuyentes, estos dos últimos, al calentamiento global.